A medida que crecemos, nuestra vida cambia y con ella, nuestras expectativas, nuestros deseos, voluntades y objetivos. Esto no puede hacerse sino es acompañado por un cambio en el sentido de la vida.
¿Y qué esto que llamamos Sentido de la Vida?
“(El sentido de la vida) Solo podría ser algo distinto de la vida: otra o la muerte. Es lo que nos condena al absurdo o a la religión. (El sentido de la vida) Solo puede ser el pasado o el futuro. Es lo que nos condena al tiempo. Un hecho cualquier sólo tiene sentido, aquí y ahora, en tanto que anuncia un determinado futuro o resulta de un determinado pasado. El sentido de lo que es, es lo que ya no es o no es todavía.”
Comte-Sponville, A.: Diccionario Filosófico, Ed. Paidós Contextos, Barcelona 2003
Luego, en nuestro rápido quehacer diario, no podemos encontrar lo que es un sentido y mucho menos, buscar el sentido de nuestra vida. Solo el hecho de una parálisis y una reflexión voluntaria pueden hacernos tener ciertas nociones para justificar la significación que tiene mi vida para mí.
¿Y el sentido puede o debe cambiar?
Tal vez este punto, uno debe plantearse lo que decíamos el principio: ¿No cambian nuestras aspiraciones vitales, nuestros deseos y nuestras metas?
Entonces, de ser así, habrá cambios latentes en la significación de nuestra. Otro aspecto podría ser que no nos cercioremos que estos cambios están ahí. Que no hayamos profundizado en lo que significa ahora el nuevo significado de mi vida.
Este caso podría ser dramático, pues ¿qué harías si, de un día para otro, descubres que todo lo que has hecho no significa nada? Podría llegar a causar un colapso vital que nos haría replantearnos el valor o la causa de nuestra vida, llegando a preferir la muerte a una vida sin significado.
Pero si has llegado a este punto plantéate lo que comenta Roxana Kreimer en su libro El sentido de la vida (Ed. Longseller, 2008, pág. 83):
“La pregunta por el sentido de la vida mantiene su vigencia si supone tener en cuenta cuáles son nuestras razones para vivir, y preguntarnos si estamos satisfechos con nuestra vida o si queremos o está en nuestras manos la posibilidad de cambiar de dirección. Saber si vivimos o sobrevivimos parece el más urgente de los asuntos, una cuestión –sin duda- de vida o muerte.
Cuando todo va bien, la pregunta por el sentido de la vida no suele surgir con tanta fuerza como cuando sobrevienen dos crisis seguidas, mueren dos familiares juntos, nos separamos o nos quedamos sin trabajo”
Así pues, llegados a este punto (y antes de que me empecéis a tacharme de coaching barato o de autoayuda simplona) tenemos que dar el siguiente paso. Este es:
¿Preguntarnos cómo hallar el sentido a nuestra vida?
Este será el punto en el que no realizaré unas instrucciones o iré diciendo frases naifs o motivadoras que, seamos francos, no nos van a llevar a ningún sitio. Para buscar el sentido propio de mi vida yo me baso de dos herramientas que nos ofrece la Filosofía: La experiencia y la razón. De la primera hayamos las impresiones sensibles, los detalles minuciosos, los errores y frustraciones y de la segunda la capacidad humana para detectar cuáles experiencias son importantes, cuales determinan mi propia satisfacción y qué detalles marcan la diferencia de mi propia plenitud. Eso, si nos basamos en la experiencia, puede durar para siempre o puede que solo te dure 2 meses. Aun así, la propia búsqueda habrá hecho que tu vida merezca un poco más la pena porque
“La vida reflexionada es la única que vale la pena ser vivida”
Sócrates
Para mi, ahora, el sentido de la vida es no andar dando vueltas buscandolo. Tan sólo se trata de dejarse llevar por ella.
Jorge Gracias por tu hermosa reflexión! Es interesante el poder analizar el sentido de la vida y cada vez mas darnos cuenta cual es la razón de nosotros en este mundo!
No dejes de escribir!
Un abrazo y buenas energías!
Con amor
Andrea
hay dias donde cuestiono el sentido del porque estamos aqui….otros simplemente dejo de pensarlo y vivir. de todas maneras lo mas probable es que el sentido no lo veamos en este plano terrenal, eso es lo que mas segura me tiene, pero claro, son opiniones. de mi parte y los chicos de la hermandad blanca, enviamos bendiciones chicos, gran blog. besitos
Basta con reflexionar sobre el sentido de nuestra vida para acercarnos un poquito más y reconocerlo. Pienso que está dentro de nosotros mismos.
La vida es un engaño. No tiene ningún sentido, ningún fin, excepto el de replicarse, reproducirse. Y la única motivación de cualquier actividad humana, desde la mas simple al pensamiento mas elevado, es el miedo a la muerte o instinto de supervivencia. Fuera de eso no hay nada mas sobre lo que podamos decir algo.
EL sentido de la vida de cada persona produce un conjunto de ideas que tienen que ir acoplándose para que no haya un caos en la sociedad. Por lo tanto se deduce que nuestro sentido de la vida de cierto modo es ajustado por la sociedad. Lo que nos hace cuestionar que si la sociedad sigue un rumbo, y me doy cuenta que en el futuro habrá un grave problema, debe haber un cambio en la sociedad, y si suponemos que se corrige, y después otros encuentran otro problema, y así sucesivamente implica que la sociedad tendría que ir mejorando, pero pasa lo contrario, significa que alguien que quiso mejorar un aspecto, en realidad empeoro en otro o otros. Lo que conlleva a pensar que si somos perfectos encontraríamos el sentido de la vida estable verdadero y la definición del diccionario filosófico estaría mal, porque dice que `’El sentido de lo que es, es lo que ya no es o no es todavía” se tendría que borrar “ o no es todavía” porque en el futuro sera siendo igual estable y perfecto (si somos perfectos no cambiaríamos lo que ya esta perfecto porque existe solo una clase de perfecto debido a que si queremos cambiar a otra perfección deberían hacerse pasos perfectos hasta llegar al perfecto pero sin salir de la perfección de partida por lo que se llega a un absurdo). Entonces si no somos perfectos tenemos que seguir a alguien perfecto, Salmos 101:2 Entenderé el camino de la perfección Cuando vengas (Dios) a mí.En la integridad de mi corazón andaré en medio de mi casa. Juan 3:16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
“La vida tiene sentido en cuanto que tengas un fin al cual llegar” Y aunque cada personas tenga una experiencia distinta, siempre tiene en común, el fin que persigue.
La vida tendría un sentido absoluto si le encontráramos el origen común que con seguridad existe para los seres humanos. Mientras, nos deberemos conformar con encontrarle (aunque sea con artificios), un sentido personalista y por tanto egoísta.
Olá! Excelente site! Parabéns pelo belo trabalho, já estou seguindo.
Aproveitando a oportunidade gostaria de compartilhar com vocês nosso
blog de Filosofia. Ficaremos felizes pela visita e mais ainda se seguir-nos.
Dê uma olhada no trabalho: http://www.filosofiahoje.com/ Abraço!
interesante reflexión. Para el que aún se haga preguntas y cada pregunta amplíe su curiosidad, he topado con una página que merece especial atención. Comparto el enlace esperando pueda ser de su interés. El debate en estos tiempos es obligado…http://www.aventurapensamiento.com/
la vida como tal “No tiene sentido” no existe un sentido común o sentido ultimo.. cada ser humano le da sentido a su Propia vida de acuerdo a sus experiencias y creencias de su entorno… lee esto: http://ifenyx.blogspot.com/2015/02/la-vida-no-tiene-sentido.html
pienso que eso que llamamos sentido de la vida, solo lo podemos saber hasta llegar al pleno punto de satisfacción o derrota, ya que nosotros como personas bajo una u otra situación directa o indirectamente nos involucra, nos pone en un estado donde pensar y pensar es la única salida y en ese orden de ideas dependiendo de la persona busca el sentido de la vida